Buscar en ADSADN Buscar en Google

30/7/09

La universalidad de la música: Pentatónica McFerrin

A veces la vida tiene su propia lógica interna que nos sorprende. Cortázar encontraba líneas en su tablón, trazos que se juntaban para crear algo que no debería estar ahí. Hace poco acabé la lectura del fantástico libro Musicofilia de Oliver Sacks (tengo que hacer una reseña como está mandado). En este libro se describen diferentes alteraciones neurológicas que conducen a personas con sentidos musicales diferentes a los de la media. Gracias al estudio de estos casos clínicos se llega a conclusiones que, aunque puedan parecer evidentes, no dejan indiferente. La música es universal, única, humana, e independiente.

Lo curioso es que, pocos días después, me encuentro (via Menéame) este indescriptible video del genial Bobby McFerrin (me estoy poniendo jazzero últimamente) en una convención mundial de ciencia. Miradlo y escuchad lo que dice al final, algo así como: "Lo increíble es que, vaya donde vaya, en todo el mundo la gente siempre responde así. Es la escala pentatónica, que por alguna razón....".



El señor McFerrin es un cantante fuera de serie, con un directo original e impactante. Hay muchísimos discos recomendables, pero destacaré un par que no me canso de escuchar: Spontaneus Inventions i Hush, con el cello de Yo-yo Ma.

Y para muestra, un youtón (o un par):






Ver la entrada completa

12/7/09

Nobel Laureates Lindau Meeting

Sé que hace una semana desde que volví de Lindau, pero, creedme, entre compromisos sociales y laborales, me ha sido imposible escribir antes sobre este magnífico evento. Dejadme que os ponga en sitaución:

600 jóvenes investigadores de 68 países conversando entre ellos, interactuando, hablando, intercambiando opiniones, etc. Pero no sólo entre ellos, sino también con 24 premios Nobel. Un lujazo. Por mucho que lo intentase no podría describiros la atmósfera que se respiraba.

La organización del Encuentro fue impecable, todo salió como debía... o mejor. Una de las iniciativas de este año fue la de llevar la experiencia de Lindau a todo el mundo, utilizando las infinitas posibilidades de internet. Entre éstas, cabe destacar el blog del Encuentro (en el que podéis encontrar el audio de la entrevista que hice conjuntamente con Tobias Maier a Martin Chalfie), o la posibilidad de ver las charlas y coloquios de los premios Nobel. En este sentido, quiero recomendaros especialmente la mesa redonda sobre el cambio climático, la magnífica charla de Sir Harold Kroto, o las charlas de Martin Chalfie y Roger Tsien. Evidentemente, el resto también fueron interesantes, pero tenía que escoger alguna... (En esta línea también quiero destacar la fantástica iniciativa del Comité de Lindau por ofrecernos charlas anteriores, como las de von Euler o Paul Dirac. Verdaderas joyas de la ciencia).

Gracias a las gestiones del personal de prensa del Encuentro, tuve el inmenso honor y la fantástica suerte de poder entrevistar personalmente a cuatro de los agraciados.

  1. Peter Agre. Premio Nobel por el descubrimiento y estudio de las acuaporinas: canales proteicos de agua. ¿Tan importante es un canal de agua? Pues quizás no os podéis hacer ni una mínima idea. Las acuaporinas intervienen activamente en procesos tan dispares como la secreción de insulina, el transporte de metales pesados, el sudor... o la producción de orina. En este último sentido, y como anécdota, cabe destacar que es responsable del efecto diurético de las bebidas alcohólicas. Pero, además, Peter Agre es un magnífico divulgador que ha llegado a la presidencia de la AAAS, la asociación americana para la difusión de la ciencia, que edita una revista... ¿Cómo se llamaba la revista?... ¡Ah, sí! Science. En fin, os podéis imaginar lo nervioso que estaba durante la entrevista. Menuda responsabilidad.
  2. Kurt Wüthrich. Agraciado por su trabajo con la técnica de la Resonancia Magnética Nuclear, la cual está llamada a desarrollar un papel principal en la nueva era de la proteómica. La historia del Dr. Wüthrich merecería una entrada aparte.... quizás algún día la haga.
  3. Martin Chalfie. Premio Nobel el año pasado por su brillante (nunca mejor dicho) idea de utilizar una proteína de medusa en biomedicina: la famosa GFP (de la cual hemos hablado en varias de nuestras entradas: [1], [2], [3], [4], [5]). Ferviente defensor de la investigación básica y de la necesidad de estudiar otros organismos (no modelos), el Dr Chalfie habla alto y claro. Si algún día tenéis la oportunidad de asistir a una de sus charlas o ver alguna de sus entrevistas, no lo dudéis.
  4. Werner Arber. Premio Nobel (¡en 1978!) por la predicción de la existencia de las enzimas de restricción. Un pozo de sabiduría. Miembro además, del Comité organizador de los Encuentros de Lindau, por cuya labor ha recibido este año la medalla de Lennart-Bernadotte. Más que una entrevista, pude disfrutar de una magnífica charla con el Dr Arber. Un encanto de persona y un excelente pensador de lo que me gustaría denominar Biología teórica (si los químicos lo tienen, ¿por qué no nosotros?).


Además de los premios Nobel, la estancia en Lindau me ha permitido conocer a periodistas y jóvenes investigadores de todo el mundo, y hablar con ellos de muchísimos temas. Mención especial se merece la delegación de jóvenes investigadores españoles con los que tuve la suerte de mantener una especie de charla dirigida, algo así como una entrevista coral en la que pude escuchar sus interesantes e inteligentísimas opiniones. ¡Muchas gracias! Si éste es el futuro de la investigación de nuestro país, podemos estar tranquilos. ¡Tenemos fuelle para rato!

En fin, ya acabo. Sólo quiero recomendaros que os deis un paseo por la página oficial del Meeting, así como por la página oficial de los premios Nobel, donde podréis encontrar mucha información sobre los galardonados, y, en muchos, casos, disfrutar de entrevistas personales con ellos, grabadas en su inmensa mayoría, en Lindau.


Ver la entrada completa