A todos nos gusta pensar que nuestro cerebro tiene capacidades que van más allá de nuestras actividades cotidianas, como saber-se la lista de los Pokèmons o el nombre de los concursantes de todos los Gran Hermano hasta día de hoy. El hecho es que sí, que tenemos capacidades que superan nuestra imaginación y que a menudo permanecen ocultas a nuestra "mente consciente". Desgraciadamente, cuando la gente oye esto piensa que nos referimos a que podemos ver el futuro en sueños, o "percibir" cual será el gordo de Navidad... Pues no... Pero que os pareceria si os dijese que la mente humana tiene la capacidad de hacer juicios sobre otras personas en menos de un segoundo que resultan acertados en un alto porcentaje de casos? En definitiva, todos sabemos que nuestro cerebro emite juicios a una velocidad sorprendente, especialmente en lo que concierne a nuestra opinión sobre alguien a quién acabamos de conocer (hay quien dice que todas las relaciones están marcadas por los 6 primeros segundos...) La cuestión es... ¿Qué otros aspectos de nuestra vida estarán gobernados por este sistema de "justicia rápida"? Ay, ay, ay...
En un reciente experimento conducido en la Tufts University de Medford, Massachussetts por N. Ambady i N. Rule, y recogido en ScienceNow per Matt Kaplan, se quiso evaluar la capacidad para juzgar de forma rápida la orientación sexual de las personas recogidas en una muestra de fotografías (voluntarios que se tomaron una foto y declararon su orientación sexual).
Se escogieron grupos de "jueces" a quienes se mostró las fotografías. Cada grupo tenia una cantidad de tiempo diferente para ver la foto y decidir si la persona era homo o heterosexual. Los tiempos dados iban de 33 milésimas de segundo hasta 10 segundos. Ahora viene lo bueno... Con 33 milésimas de segundo, la capacidad de acertar no fue significativamente buena; no obstante, el grupo que tenía 1 décima de segundo (osea 100 milésimas) consiguió acertar casi en un 70% de los casos. Y aún un detalle más: a partir de 100 milésimas y hasta el grupo que tenía 10 segundos, los resultados no mejoraron significativamente; es decir: el juicio es bastante correcto con un periodo relativamente corto, y no mejora por mucho que te den más tiempo... cosa que parece sugerir la existencia de una habilidad inconsciente de análisis rápido de información que escapa a nuestro pensamiento verbalizado.
De hecho, Ambady ya condujo un estudio con objetivos similares en el año 1994. En aquella ocasión, a los voluntarios se les presentaban (atención) 2 segundos de vídeo de un profesor dando clases. A continuación se les pidió que escribiesen una evaluación sobre las competencias del profesor. Pues bien, la evaluación escrita por voluntarios que habian dispuesto de 2 segundos para juzgar al profesor... coincidían significativamente con las evaluaciones escritas por los propios alumnos sobre su profesor a finales de curso!
22/1/08
Gay a primera vista...
Y Tom... ¿qué será? Tenéis 100 milisegundos! De Flickr
Publicado por Quim ADSADN en 8:31
Etiquetas: Actualidad, Antropología, Curiosidades
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